Debes declarar el uso de tu marca, o se pierde.

Si tu marca te fue otorgada a partir del 10 de agosto del año 2018, tienes que declarar su uso a los 3 años de que te fue otorgada. Esta declaración de uso debe de ser hecha dentro de los 3 meses siguientes a que tu marca cumplió 3 años de haber sido otorgada. 

Dicha obligación proviene del artículo 233 de la Ley Federal de Protección a la Propiedad Industrial. El cual dice lo siguiente:

El titular de una marca deberá declarar su uso real y efectivo, indicando los productos o servicios específicos a los que ésta se aplica, acompañando el pago de la tarifa correspondiente.

La declaración se presentará ante el Instituto durante los tres meses posteriores, contados a partir de que se cumpla el tercer año de haberse otorgado el registro.

¿Por qué solo aplica a las marcas otorgadas a partir del 10 de agosto del 2018? La actual ley de Propiedad Industrial fue publicada el 1° de julio del año 2020. Pero en su décimo primer artículo transitorio señala que la obligación de declarar el uso de la marca, aplica para las marcas otorgadas a partir del 10 de agosto del año 2018. 

Esta declaración puede hacerse físico o en línea, implica un pago de derechos por $985.67, y requiere una manifestación en el sentido de que se está usando la marca. 

Si no se presenta la declaración de uso antes referida, la marca caduca en automático. Y cualquier otra persona tiene la posibilidad de registrarla a su favor. 

Si tu marca fue otorgada antes del 10 de agosto del 2018, solo tendrás que preocuparte por renovarla dentro de los 6 meses previos a que cumpla 10 años. Pero una vez renovada, sí aconsejo que se contemple la declaratoria de uso a los 3 años de la renovación. 

Presentar la declaratoria de uso antes señalada, no exime al titular de la obligación de seguir usando su marca; porque todavía quedarían 7 años de vigencia en los cuales se deberá usar la marca. 

Toda vez que tanto la ley actual como la anterior, contemplan la posibilidad de que alguien pida la caducidad de una marca bajo el argumento de que el titular de la misma no la usó durante tres años. Por lo que esto aplica a todas las marcas, con independencia de si fueron otorgadas antes o después de agosto del año 2018. 

Todo lo anterior tiene su razón de ser: el otorgamiento de una marca es dar un monopolio sobre un signo distintivo. De ahí que lo menos que puede hacer el beneficiario de ese monopolio, es usarlo.

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