Las reglas del comercio electrónico tienen NUEVAS REGLAS. Si vendes por internet (o compras), ojo: no basta con que tus políticas de compra y entrega estén publicadas en tu página web para que sean obligatorias.
La historia: un comprador adquirió boletos por internet. Cuando fue a recogerlos, la empresa le exigió pagar un cargo adicional de $10 (sí, diez pesos) con la misma tarjeta. El banco no procesó el pago y… ¡le negaron los boletos!
La empresa alegó que sus políticas de compra (publicadas en su web) exigían ese pago adicional. Los tribunales de primera instancia le dieron la razón… pero la Suprema Corte dijo lo contrario:
Publicar las políticas en alguna sección de tu página no es suficiente. Para que sean vinculantes, es necesario acreditar que el consumidor las tuvo a la vista en el momento exacto de la compra.
En otras palabras:
- El consentimiento no se presume: debe probarse que el comprador pudo leer y conocer las condiciones antes de dar clic en “comprar”.
- El proveedor debe cumplir con la Ley Federal de Protección al Consumidor: las cláusulas del contrato de adhesión deben ser claras, legibles y visibles al momento de contratar.
- Si no se acredita esto, esas políticas no obligan al consumidor.
¿Por qué importa esto?
Porque si vendes en línea y tu página solo tiene un link escondido con las políticas, podrías perder un juicio. Y si compras, esta jurisprudencia es un respaldo para reclamar cuando te exijan condiciones que no viste al comprar.
Tip práctico para vendedores en línea: asegúrate de que tus políticas aparezcan antes de finalizar la compra, con una casilla de aceptación expresa (“He leído y acepto…”). Esto no solo protege legalmente, sino que evita malentendidos.
En L-A Legal asesoramos tanto a proveedores que venden en línea y quieren blindar sus contratos, como a consumidores que han enfrentado prácticas abusivas.
Si tienes dudas sobre cómo adecuar tu e-commerce o defenderte en un caso similar, contáctanos. Porque en internet, lo que no se ve… no obliga.




